¿Te imaginas despertarte bajo un pino con vistas al Mediterráneo, tomando tu café al aire libre y preparando la aventura overlanding en españa de un fin de semana con tu pareja? Eso fue exactamente lo que vivimos Sonia y yo en el Camping Moraira, ¡y queremos contártelo para que tú también te animes a vivirlo!
🌲 1. Llegada y primeras sensaciones
Desde el momento en que llegas, notas un ambiente muy tranquilo: el camping está en una ladera rodeada de pinos que ofrecen sombra natural, y la zona está impecable. Las parcelas están bien delimitadas, y algunas tienen vistas parciales al mar, lo que añade un encanto especial. Las instalaciones, como baños y lavandería, son modernas y super limpias.

2. Tu primera tarde: relax y puesta de sol
Nada más instalarte, te recomendamos dar un pequeño paseo por el camping. Los bares y restaurantes cerca de alli , con sus terrazas modernas y vistas desde grandes ventanales, son ideales para tomar algo antes de que el sol empiece a caer.
Mientras tomas tu bebida preferida, podrás observar el entorno, escuchar música suave y sentir cómo el día se transforma en noche.
3. Dormir y despertar con calma
Pasar la noche en este entorno es muy relajante. Los sonidos de la naturaleza, el silencio entre los árboles y la comodidad del entorno hacen que el descanso sea profundo. Al amanecer, te despiertas con luz filtrada, el canto de pájaros y la brisa marina—un despertar que te conecta con lo natural.

4. Sábado: explorando Moraira y Costa Blanca
Después de desayunar bajo tu toldo o lona, puedes aprovechar para dar una vuelta a la tarde por Moraira. Está a unos kilómetros del camping y tienes acceso fácil en coche o incluso en bici si te animas. Pasea por el puerto deportivo, luego continúa hacia la playa de arena fina y aguas cristalinas. En verano, el mar está cálido y muy agradable para un baño relajante.
Para comer, existen múltiples opciones con cocina local: desde arroces hasta pescados frescos. Puedes buscar calas más pequeñas para disfrutar de un picnic rodeado de naturaleza.

5. Vuelta al camping y piscina
Por la tarde, de regreso al camping, puedes darte un chapuzón en la piscina. Es pequeña pero muy agradable, y tiene una sección con ventanales donde puedes ver a otros nadadores y darte una sensación visual muy curiosa. Muy recomendable si quieres relajarte sin ir hasta la playa.
6. Noche bajo las estrellas
Ya entrada la noche, encendimos una pequeña luz ambiental junto a la mesa, preparamos algo ligero (una ensalada o tortillas), y hablamos largo rato mientras mirábamos el cielo. La contaminación lumínica es baja, así que si te animas, puedes ver estrellas con claridad. Es perfecta la compañía, una copa de vino y una charla tranquila al fresco.

7. Domingo: deporte suave y despedida con mar
El domingo decidimos hacer otro paseo al mar. Después, recogimos con calma, tomamos un último café y salimos entre abrazos sabiendo que habíamos aprovechado cada instante.
¿Por qué te encantará Camping Moraira?
- Ambiente tranquilo y muy bien cuidado: ideal para relajarte en pareja, sin prisas.
- Instalaciones de calidad: baños modernos con acabados cuidados, lavandería, bar-restaurante y una piscina agradable.
- Ubicación estratégica: cerca de Moraira, su playa y puerto, pero lo suficientemente apartado para ofrecer paz y naturaleza.
- Opciones de actividad: caminatas, playa, escuela de buceo, bares locales.
Consejos reales que te servirán si vas
- Haz la reserva con tiempo, especialmente en temporada alta.
- Lleva calzado cómodo: el terreno es algo inclinado y con rocas, especialmente en las parcelas superiores.
- Planifica tus comidas, hay restaurantes cercanos pero también supermercado en el pueblo.
- Incluye actividades al aire libre: una mañana de buceo o kayak (si te animas) añade emoción.
- Disfruta del momento: las mejores experiencias no necesitan lo más caro, sino buena actitud y compañía.
Cómo viví el fin de semana, contado en tu piel
Imagínate que eres tú quien conduce hasta el camping, aparcas la autocaravana o montas tu tienda, y respiras profundo mientras bajas la persiana o cuelgas la lona. Ves las colinas, el mar a lo lejos, el aroma del pino… Te relajas al instante. Preparas una cena sencilla y disfrutas de una charla sin prisas. A la mañana siguiente, tomas un camino hacia el paseo marítimo de Moraira y te sientes libre mientras observas barcos pequeños y te acercas al agua. Por la tarde vuelves al camping, te enfrías en la piscina y cierras el día con una copa y un cielo estrellado. Esto es lo que sucede cuando decides que un fin de semana merece ser vivido al ritmo de la naturaleza y la desconexión.

En resumen
Este fin de semana en Camping Moraira fue una combinación perfecta de naturaleza, tranquilidad, mar y convivencia sencilla. Si lo que buscas es un lugar sin agobios, cercano al mar y con encanto, este sitio es una joya. Sonia y yo lo disfrutamos al máximo y lo plasmamos en nuestro video por si quieres verlo en acción YouTube.
Así que, ¿a qué esperas para planear tu próxima escapada? Moraira te espera con su brisa, su paisaje y toda la serenidad que necesitas. ¡Nos vemos por allí!